Mazda 3 MPS

El Mazda 3 MPS en su exterior no es demasiado llamativo en comparación con otros compactos caracterizados. El MPS solo destaca por sus grandes llantas, los paragolpes son diferentes a las otras versiones del Mazda 3 al igual que las taloneras, las aletas están un poco ensanchadas y por ultimo una salida de escape de 102 Mm. de diámetro. En el interior a simple vista lo primero que vemos como cambio en este acabado deportivo MPS, son los asientos, muy cómodos, duritos, y que recogen el cuerpo a la perfección. El salpicadero es exactamente igual no sufre ninguna modificación. El cuadro de instrumentos es casi igual solo destaca el tarado del cuenta kilómetros hasta 280. El Mazda 3 MPS también destaca por su buen equipamiento de serie, trae todo de serie, solo como opción podemos escoger la pintura metalizada, en este caso solo 4 tipos de pintura, pero quien quiere más en coche de este tipo.

Visibilidad
En cuanto a visibilidad el Mazda 3 en general no presenta problemas, la visión que tiene el conductor hacia cualquier parte del exterior desde el vehículo es buena, la visibilidad delantera es la correcta. La trasera al igual que en todos los vehículos queda mermada por los reposacabezas, pero si los bajamos a su posición mas baja no molestan. Los retrovisores tanto exteriores como el interior son de buenas medidas, y dan una visión clara de lo que acontece fuera del vehículo.

Impresiones de Conducción
Antes que nada resaltar que la mayor parte de la prueba realizada al Mazda 3 MPS fue con lluvia. El Mazda 3 MPS es un vehículo muy radical adaptado a la calle, su forma de conducirlo es completamente diferente a la de otro vehículo de prestaciones parecidas. Si queremos aprovechar la máxima aceleración del propulsor tendremos que mediar bastante con el acelerador, ya que si por alguna razón pisamos a fondo, lo único que conseguiremos es hacer derrapara el eje delantero mucho tiempo y no ganar nada. La entrega de potencia del propulsor es muy brusca, el eje delantero se ve más de una vez incapaz de digerir tal cantidad de caballos desbocados. Pero recordar que esto solo sucede con el pavimento mojado o húmedo. En circunstancias de buen tiempo y pavimento seco, solo apreciaremos leves pérdidas de tracción. La unidad probada dio en banco de rodillos casi 300 caballos, medido por una revista del motor española. La potencia máxima se obtenía a un régimen de potencia irreal, cerca de las 4.500 vueltas. Y la verdad que conduciendo el Mazda 3 MPS en esa franja de revoluciones se desbocaba la caballería, había que ser muy fino con el tacto del acelerador sino queríamos acabar en la cuneta.

Frenada
Al igual que otros compactos potentes, no solo es cuestión de un motor resultón y potente para tener un bólido rápido. También tenemos que tener en cuenta los frenos, suspensiones etc… En este caso Mazda ha montado en el MPS un equipo de frenos excelente. Los discos delanteros auto ventilados de 320 Mm. y traseros macizos de 280 Mm. son capaces de detener al MPS en muy pocos metros y no acusar en exceso el calentamiento por uso intensivo de los mismos. El control de estabilidad (DSC) y el ABS de segunda generación son de serie en el Mazda 3 MPS

Tracción
El Mazda 3 MPS es el compacto más potente tracción delantera y con menor tamaño. Los 260 CV que desarrolla el propulsor son trasmitidos solo al eje delantero. Y en ocasiones no es capaz de digerir tal cantidad de potencia. Aun teniendo autoblocante, control de tracción activado y unas buenas ruedas (215/45/18″) tendremos perdidas de tracción en salidas, curvas enlazadas. Pero no es un problema para nada grave, solo sucede en días de lluvia, y teniendo tacto con el acelerador, no sucede este fenómeno. Es un vehículo que requiere una adaptación por parte de su conductor. El conductor tiene que aprender a conducir este vehículo y con el tiempo poder sacar el máximo partido el MPS, que da mucho juego.

Estabilidad
La estabilidad del Mazda 3 MPS se podría comparar a la de un «kart», va muy durito de suspensiones, pero sin ser molesto en conducción urbana. En carretera se agradece tener un tarado de suspensión tan duro y de un recorrido eficaz. El Mazda esta rebajado de suspensión y cuenta con unas barras estabilizadoras más anchas que las de los Mazda 3 normales. El chasis ha sido reforzado para así tener una mayor dureza en conducción decidida. Con todas estas mejoras el MPS tienen un 60 por ciento menos de balanceo.

Reposacabezas
El Mazda 3 MPS tiene cinco reposacabezas, de los cuales, los delanteros son regulables en altura, no en inclinación. Los traseros al igual que los delanteros, solo son regulables en altura. Ninguno es activo.

Cinturones
El Mazda 3 MPS monta cinco cinturones del tipo estándar, de tres puntos de anclaje. Los delanteros cuentan con pretensores pirotécnicos.

Bebes y Niños
El Mazda 3 MPS esta equipado con el sistema ISOFIX de anclaje de sillitas de bebes. Aun que en una versión deportiva como es el MPS no es lo mas indicado, pero si perfectamente valido para el transporte de niños.

Airbags
El Mazda 3 MPS trae de serie en este acabado ocho Airbag, que son: De conductor, acompañante (desconectable mediante llave), laterales, de cortina, etc…

Euroncap
En las pruebas EuroNCAP el Mazda 3 MPS obtiene: 4 estrellas para la protección de ocupantes y 3 estrellas para la protección infantil un total de 33 puntos sobre 39.

Recuperaciones
El Mazda 3 MPS tiene una aceleración de 0 a 100 Km. /h de 6,1 segundos. Recuperando en tercera marcha desde 80 Km. /h a 120, lo hico en 3,7 segundos, en cuarta marcha lo hico en 4,4 segundos, en quinta marcha en 5,2 y en sexta marcha en 8,1 segundos. Como es comprensible a medida que metemos una relación superior el tiempo aumenta.

Caja de Cambios
El Mazda 3 MPS monta en esta versión deportiva una caja de cambios manual de seis relaciones. El tacto de la palanca es duro, pero muy directo. Introducir las marchas requiere un poco mas de fuerza que en otras cajas normales. Una vez en marcha el cambio de una marcha a otras es rápido, pero podía serlo más, ya que en conducción rápida hay ocasiones en la que la caja se vuelve un poco lenta. La sexta marcha de 41,7 Km cada 1.000 revoluciones, es un poco corta para un vehiculo como este, pero mas aprovechable en otros tipos de carreteras.

Circulando por Carretera
En carretera es donde de verdad podemos apreciar que lleva el Mazda 3 MPS debajo del capó, en esta caso un propulsor de 2.3 litros, con inyección directa, intercooler y turboalimentado que eroga 260 CV a 5500 revoluciones. En carreteras sinuosas de montaña disfrutaremos de este gran propulsor tanto de sus capacidades de aceleración, como de su bonito sonido a altas vueltas. En carretera haciendo una conducción decidida el consumo que obtuvimos supero en poco los 20 litros a los 100. También destacar que si mimamos el acelerador, el consumo puede bajar sin problemas de los 10 litros a los 100.

Circulando por Autopista
En autopista el Mazda 3 MPS, es cómodo en carreteras en buen estado. Ya que su suspensión resulta un poco seca si pasamos por pavimento en mal estado, y trasmite los ruidos y golpes al interior del habitáculo. El consumo en autopista es relativamente bajo, si vamos a una velocidad constante de 120 Km/h podemos tener consumos muy bajos para la potencia del propulsor que equipa el MPS.

Circulando por Ciudad
En ciudad el Mazda 3 MPS tiene unos consumos un poco altos, de unos 13 litros a los 100. El manejo del MPS por ciudad es bastante cómodo, la buena respuesta del propulsor ayuda ha incorporaciones rápidas.

Calidad de Acabados
Los acabados utilizados en el Mazda 3 MPS son de buena calidad, a simple vista se puede observar que los plásticos encajan bien entre si, y que no hay ruidos extraños.

Calidad de Materiales
Materiales de buena calidad, plásticos aparentes y de un buen tacto. Al igual que las telas utilizadas.

Conclusiones
El Mazda 3 MPS es un deportivo con carácter, adaptado a la calle. Su potencia y sobretodo la manera de entregarla hacen de el, un vehículo muy especial. Su comportamiento es muy bueno en cualquier situación.

A favor: Propulsor excelente, estabilidad, acabados.
A mejorar: Perdidas de tracción, consumos.

Redactor y probador: Daniel Galdeano Martnez