Esta semana nos subimos al nuevo Audi A3 Sportback e-tron, híbrido enchufable. Hermano del Volkswagen Golf GTE, tecnológicamente hablando.
Cuando probamos el Golf GTE, hace ya unos meses, pudimos disfrutar y de primera mano sus bondades como hibrido enchufable, aunque la toma de contacto ya la tuvimos en el circuito del Jarama con el Race Tour de este presente años.
La verdad es que muchos fuimos los que quedamos sorprendidos con el excelente e interesante funcionamiento del GTE, rápido, con un bajísimo gasto de carburante y aspiraciones deportivas a tener en cuenta.
En el caso del Audi A3 Sportback e-tron objeto de esta prueba hay diferencias entre ellos, por ejemplo, el Golf GTE está más caracterizado, llama más la atención y a nivel dinámico esta un paso por delante por el conjunto de suspensión más energico.
Si bien el Audi A3 e-tron se muestra más conservador en este aspecto, fácilmente confundible con cualquier unidad que monte una mecánica diésel o gasolina.
Al igual que está haciendo Volkswagen, Audi está introduciendo en su gama de modelo las versiones e-tron.
Sin duda será todo un acierto, ya que el funcionamiento del Audi A3 Sportback e-tron es cuanto menos interesante, con una potencia de 204cv resultante del conjunto del motor térmico y eléctrico. Con un alto empuje desde tan sólo acariciar el pedal del acelerador y unos bajos, bajísimos consumos en el ámbito urbano.
Si bien, tanto el Golf GTE como el Audi A3 e-tron no presentan unas cifras tan ajustadas en lo que es carretera abierta, donde los consumos no se acercan a lo que la marca homologa. El Golf GTD, cual prueba puedes ver aquí puede llegar a gastar menos en autopista-autovía. Él porque tiene su explicación.
El Audi A3 e-tron es, como su nombre indica, un hibrido enchufable, es decir, requiere, si hacemos uso de su motor eléctrico de carga diaria. La cual se hace mediante el propio cable que permite conectarse a una red estándar de 230v y 16 amperios o, si podemos, la instalación de un Wallbox, que permite una carga muy superior y rápida, cargando la batería en poco más de dos horas.
Con las baterías bien cargadas los consumos del A3 e-tron son, como hemos mencionado, son muy bajos, sobre todo por el alto uso que se hace las baterías en casi todo momento. Pudiendo circular de manera totalmente eléctrica con él hasta los 130km/h.
Ahora bien, si la batería está muy descargada o agotada y no hay posibilidad de cargar el vehículo de manera tradicional se puede hacer uso del sistema de carga del propio vehículo. Este modo es muy poco eficiente para cargar la batería, subiendo los consumos muy notoriamente.
Dicho modo no hace mermar especialmente las prestaciones del Audi A3 e-tron que, por otra parte ya va sobrado.
Las baterías del Audi A3 e-tron reflejan que pueden disponer de una autonomía cercana a los 40-45km en modo completamente eléctrico. Si bien es difícil por las condiciones de la carretera o la demanda momentánea de potencia, pero hemos conseguido realizar 30 km en modo completamente eléctrico.
Kilómetros con 0 emisiones y 0 consumo de carburante.
El cambio asociado al Audi A3 Sportback e-tron es un DSG de 6 velocidades adaptado, ya que no es igual que el común DSG en baño de aceite, si bien usan los mismos principios, el de la versión e-tron está preparado para acoplarse indistintamente con el motor térmico o el eléctrico. La suavidad habitual del DSG no se hace muy patente en el A3 e-tron donde si prestamos algo de atención se pueden notar los cambios de marchas con, en ocasiones, un leve tironcito.
El motor térmico usado en el Audi A3 Sportback e-tron es el 1.4 TFSI con una potencia resultante de 150cv. De por sí este motor es ya muy parco en consumos con unas más que buenas prestaciones. Que en conjunto con los 102cv de potencia máxima del motor eléctrico dan un cómputo general de los 204cv homologados.
En el Audi A3 e-tron, Audi ha adaptado el cuadro de instrumentos para que podamos visualizar el uso del motor eléctrico, y cuando se cargan o no las baterías.
Por otra parte, se pierde el contador de las revoluciones del motor térmico. Y, también, la ausencia de un marcador de temperatura. Pero no preocuparse, Audi lo ha introducido de manera digital en el ordenador de a bordo.
Desde la pantalla multimedia alojada en el salpicadero podemos gobernar todos los usos del sistema hibrido.
Como curiosidad y sabiendo que el Audi A3- e-tron hace mucho uso del propulsor eléctrico, más que el Golf GTE que probamos, Audi ha reforzado varias piezas internas del 1.4 TFSI para que, en arrancadas continuadas con el motor frio, este no acuse un desgaste excesivo por no funcionar en su temperatura de servicio habitualmente.