Cuando empecé a conducir, hace ya bastantes años, también nevaba, y de que forma.
Por entonces las carreteras, muchas de ellas, parecían más trochas para cabras que vías para la circulación de automóviles.
Es cierto que el número de vehículos circulando, era infinitamente menor. Pero también es cierto y fácil de entender para los que no lo vivieron que, hablar entonces de máquinas quitanieves, tráctores, Carterpillas, grúas gigantes, etc, hubiera sido inconcebible.
Nevaba en Pajares, en el Padrón, en Somosierra, en el alto del León, en Sierra Nevada, en el puerto de la Mora, en el Manzanal, en el Cebreiro, en Navacerrada, el Escudo, en las Portillas del Padornelo y la Canda, …..
Y como nevaba. Y pasábamos; con cadenas, con la ayuda de los pocos tractores, o con bueyes, mulos o cualquier otro ser vivo capaz de sacarnos del atolladero, en una España por entonces misérrima y de alpargatas, sin las comunicaciones de hoy, con escasa vigilancia y con camiones que tenían que estar por la mañana en el mercado como fuese, o tirar a las pocas horas la carga.
Lo que esta pasando hoy y la noche pasada en la AP 66, una de las autopistas más modernas y mejor diseñadas, entre las montañas leonesas y el Principado de Asturias, requeriría la automática dimisión de esa descarada ministra que todo se los pasa por allí.
Cual ha sido la solución ante la manifiesta impotencia y mala organización del sistema: cerrar la autopista y ya está. San Jo…cayó en viernes.
¿Es qué ante la previsión del temporal, anunciado hasta la saciedad, no se podían haber concentrado todo tipo de máquinas y de ayudas antes cortar la vía más importante entre Castilla y Asturias?
Durante años, hemos hecho rogativas al Cielo y a Obras Públicas para que, de una vez, se terminasen las obras entre Benavente y León. Hemos visto casi con emoción como la AP 66 bordeaba por fin el pantano de Luna y sus paisaje impresionante y, lógicamente, ante tan colosal obra, nos decíamos: “aquí, ya puede nevar”
Cuando en el tercer milenio el Hombre se pasea por el espacio y con la simple pulsión de una tecla puedes saber que tiempo está haciendo en Helsinki, en España, sus políticos se lavan las manos y siempre aparece alguien en televisión que nos da la receta; “todo está previsto, pero lo mejor es que se queden en casa, y si nieva demasiado, cerramos la vía que nos de más problemas, y santas pascuas.
Paco Costas