Volkswagen reinterpreta su Golf R en el Salón de Ginebra 2011 y exhibe cuatro versiones personalizadas con interesantes detalles estéticos y de equipamiento. Deportividad y acabados de primer nivel caracterizan a estas exclusivas creaciones.
Pinturas especiales, tapicerías bitono, inserciones de fibra de carbono…Volkswagen no ha escatimado en esta puesta de largo de su exitoso Golf R especialmente creada para el Salón de Ginebra, y ha expuesto cuatro interpretaciones diferentes de su compacto de altas prestaciones. Deportividad, por un lado, y acabados de primer nivel, por otro. La versión tope de gama del Volkswagen Golf recibe así un baño de exclusividad principalmente basado en los detalles.
El primero de ellos, pintado en blanco de efecto perla (Oryx White), monta llantas de 19 pulgadas y equipa asientos derivados del programa de personalización R Exclusive, rematados a juego con diferentes elementos del habitáculo. Destaca el contraste con las inserciones específicas de las puertas, palanca de cambios y pulsador del freno de mano eléctrico. La segunda versión, en color “Carbon Steel Grey”, juega con matices rojos en su interior y en su tapicería de Nappa perforada.
Los otros dos modelos —uno gris y otro azul— acentúan la deportividad por encima de todo, para lo que recurren a la fibra de carbono en algunas de sus terminaciones, junto con llantas de 19 pulgadas de acabado pulido y pinzas de freno naranjas en el primero de ellos. El interior cuenta con asientos muy ergonómicos de corte inspirado en la competición.