Poner un modelo saliente frente a su revisión directa no es lo que se dice una táctica popular entre los fabricantes, y es que se juegan mucho más de lo que parece. ¿Qué pasa si tienen un importante stock acumulado y el nuevo coche es muy superior al que reemplaza? ¿Y si sucede al contrario, y las mejoras son tan nimias que no merece la pena ir por él? Land Rover no parece sentirse amenazada por ninguno de estos escenarios, y sin tapujos ni tonterías ha enfrentado al Range Rover Sport Supercharged 2010 contra su hermano 2009 en el más extraño de los campos de batalla para un todoterreno: la línea recta.
Tras el salto podrás comprobar con tus propios ojos la distancia que marcan los 510 CV DIN del nuevo RR en el paso de 0 a 160 y de 160 a 0 km/h. El margen de aceleración es sencillamente bestial, pero cuando veas el tiempo y el espacio que necesita el modelo 2009 y sus 390 CV para terminar la prueba… te garantizamos que se te caerá la boca al suelo.
Gallery: Range Rover Sport 2010