Tras varios meses de rumores, la noticia no deja de ser impactante y sorpresiva, sobre todo por que se produce con efecto inmediato y cuando ya no era del todo previsible. Toyota deja la Fórmula 1: la marca nipona ya no estará presente en la categoría reina del automovilismo el próximo año, con lo que la parrilla de la temporada 2010 se queda (al menos temporalmente) huérfana de un equipo sobre los inicialmente previstos.
La difícil situación económica para el fabricante, dentro de un escenario mundial muy poco propicio, unido a la escasez de resultados en la competición con un desmesurado presupuesto, de los más abultados de la categoría, han hecho que los responsables hayan tomado la decisión de abandonar la competición, siguiendo los pasos de Honda, que ya había hecho lo propio a finales del año pasado, y de BMW, que tampoco correrá desde la próxima temporada.
A pesar de los ingentes recursos económicos que el fabricante ponía cada temporada a disposición del equipo, con presupuestos verdaderamente astronómicos, Toyota no ha conseguido ninguna victoria desde que comenzó a competir en la Fórmula 1, en el año 2002. A lo largo de estas ocho temporadas, la escudería ha conseguido tres pole position, tres vueltas rápidas, 13 podios y 278.5 puntos. Su mejor posición en el Campeonato de Constructores fue en 2005, donde finalizó en cuarto lugar. Un balance bastante gris para un equipo del que siempre se han esperado muchas más cosas pero que nunca ha terminado de confirmarse.
En una rueda de prensa en la que no han faltado las lágrimas, el jefe del equipo Tadashi Yamashina y el presidente Akio Toyoda han pedido disculpas a todos los aficionados por tener que tomar una decisión tan difícil y por no haber conseguido triunfos ni los resultados esperados. Ahora queda una plaza libre para 2010, con lo que el equipo BMW-Sauber, ahora en manos de Peter Sauber y la inversora Qadbak, podría tener su oportunidad para estar presente como el decimotercer equipo de la parrilla.
Tras los recientes anuncios de despedida de la Fórmula 1 por parte de Honda, BMW y ahora Toyota, el próximo podría ser Renault, y es que sus planes de futuro a corto-medio plazo tampoco están nada claros. ¿Qué será de la Fórmula 1 a partir de ahora? Desde luego la reducción de costes es una obligación y una urgente necesidad, algo que haría más fácil la supervivencia de los equipos y a la vez la llegada de nuevos grandes fabricantes y equipos a la competición. Pero el próximo 2010 no veremos a BMW ni a Toyota y sí a equipos como Manor, USF1 o Campos que, con todos mis respetos, veremos qué son capaces de aportar al espectáculo. Yo tengo mis dudas.
En cualquier caso, la vida sigue, también en la Fórmula 1. Nico Hulkenberg y Rubens Barrichello serán los nuevos pilotos de Williams (desde 2010 con motores Cosworth) y Fernando Alonso estará en Ferrari, mientras que todavía no conocemos el destino de Kimi Raikkonen. Lo que sí sabemos es que Bridgestone tampoco estará en la F1 desde 2011: la próxima temporada es la última que serán los suministradores oficiales de neumáticos, y a las demás marcas importantes de neumáticos no se les ve mayor interés en formar parte del circo. Esperemos que pronto amaine la tormenta, aunque nunca se sabe si lo peor todavía está por llegar.