Si sigues de cerca la actualidad verde, sabrás que Toyota y Tesla están trabajando juntas en el desarrollo de vehículos eléctricos. No hace mucho el presidente del fabricante japonés confirmó que ya tenían un prototipo en camino, pero ahora sabemos gracias a Tesla que en realidad son dos, e incluso podemos ponerles nombres: RAV4 y RX (prueba).
Siguiendo los planes delineados por ambas empresas, Tesla hará entrega este mes de dos todocaminos eléctricos para que Toyota pueda evaluar la calidad de las baterías y su fiabilidad. Al parecer, la idea es terminar con una mula de pruebas sobre la base del Corolla, pero ahora mismo una carrocería SUV parece la más apropiada para acomodar al importante paquete acumulador de Tesla.
La meta, termine donde termine, está clara: un rango de 240 kilómetros en un automóvil Toyota sin emisiones, y con un precio de 40.000 dólares en Estados Unidos. Algo elevado si nos fijamos exclusivamente en el PVP, dado que ahora mismo un Prius básico sale por 22.000 dólares. Toyota (y el resto de los fabricantes) tendrán que realizar un gran esfuerzo para educar a los consumidores y hacerles ver que los costes de mantenimiento también han de computarse a la hora de cambiar de coche…
