Buenas noticias para el fabricante más pequeño de Corea del Sur. La justicia del país ha aprobado un plan que evitará la liquidación de SsangYong Motor, una escalofriante posibilidad que por momentos llegó a parecer casi certera. Tras declararse en suspensión de pagos en febrero, la compañía tuvo que enfrentarse a una desagradable realidad, y es que pese a formar parte de SAIC, el grupo chino decidió lavarse las manos cuando la situación del fabricante comenzaba a presagiar lo peor.
Según un informe elaborado por PricewaterhouseCoopers, el valor de liquidación de SsangYong sería muy inferior al de una compañía reestructurada y en posición de seguir fabricando automóviles, motivo por el cual recibirá una nueva oportunidad. Ahora SsangYong deberá entregar su nuevo plan de viabilidad a mediados de septiembre, aunque por el momento las medidas adoptadas parecen estar surgiendo efecto.
La nueva estrategia de la marca contempla una importante reducción de su plantilla, así como el lanzamiento de una nueva gama de vehículos más atractiva para el público, encabezada por el C200. La verdad es que su crossover compacto no arrebató nuestros corazones durante su presentación, pero está claro que SsangYong no puede seguir viviendo con el catálogo actual, y si con el C200 llegan nuevos clientes, bienvenido(s) sea(n).