El ministro de Industria, Miguel Sebastián, ha manifestado en la capital aragonesa, después de visitar la planta de Opel en Figueruelas (Zaragoza), que es el momento de la ‘ofensiva’ tras el acuerdo alcanzado entre la canadiense Magna y General Motors (GM) para que la primera adquiera las plantas europeas de Opel.
Sebastián ha viajado a Ruesselsheim (Alemania) para abordar con el consejero delegado de General Motors Europa, Carl-Peter Forster, el futuro de la planta de Opel en Figueruelas y el jueves a San Petersburgo (Rusia) para contactar con el banco ruso Sberbank, que junto con la canadiense Magna será uno de los principales accionistas de Opel.
El ministro de Industria recalcó, en declaraciones a los medios de comunicación en la sede del Gobierno de Aragón, que la planta de Figueruelas es de las ‘más competitivas’ de Europa, lo que hace que ‘gran parte del trabajo’ de defensa de esta planta esté hecho.
Al respecto, Sebastián puntualizó que en caso de que Magna quiera reducir trabajadores en las plantas europeas de Opel, en la de Figueruelas, por su productividad, esta reducción debería ser ‘incomparablemente inferior’ a otras factorías que son menos competitivas.
Asimismo, el ministro de Industria aseguró que estarán ‘vigilantes’ y tendrán en cuenta la ‘letra pequeña’ de este acuerdo, pero consideró que hay que ser ‘optimistas’ con el futuro de la planta de Opel en Figueruelas.
Sebastián reunió en la factoría de Figueruelas con los responsables de la planta y los miembros del Comité de Empresa, a quienes transmitió que Gobierno de Aragón, Gobierno de España y sindicatos ‘estamos en el mismo barco para garantizar el futuro’ de esta planta ‘en las mejores condiciones posibles’.
‘Sabemos que es algo difícil, porque la decisión no depende de nosotros’, advirtió, pero recordó que Figueruelas ‘tiene una enorme ventaja, que es la competitividad y la productividad’ porque esta planta ‘es la primera en eficiencia, en productividad y la primera o segunda en mejores costes logísticos y en sensibilidad medioambiental’.
Por ello, ‘tenemos una gran ventaja de partida’ si se opta por una solución industrial, ‘como así esperamos’, para las plantas europeas, porque Figueruelas está ‘en primera línea’. Aún así, el ministro aseguró que ‘vamos a seguir trabajando’, dado que asegurar el futuro de Figueruelas es la ‘prioridad’ del Gobierno de España y del Ejecutivo aragonés.
Sebastián se reunió el lunes en Figueruelas con representantes del Comité de Empresa de la planta para transmitirles su apoyo.
Sebastián se reunió el lunes en Figueruelas con representantes del Comité de Empresa de la planta para transmitirles su apoyo.
El mensaje que Sebastián transmita en su viaje a Ruesselsheim es que la planta zaragozana es ‘prioritaria’, por su ‘competitividad, por su inversión, por la capacidad de diálogo de los sindicatos y por el interés de toda la ciudadanía de Aragón por el mantenimiento de esta planta’.
De esta forma, defenderá una solución industrial para General Motors Europa, porque ‘ahí estará sin duda la planta de Figueruelas’, dijo Sebastián, que acude a Alemania acompañado por los consejeros de Economía e Industria aragoneses, Alberto Larraz y Arturo Aliaga, respectivamente.
Esta misma idea trasladará también en su viaje a San Petersburgo para reunirse con el banco ruso que entrará a formar parte del accionariado de Opel junto a Magna, un encuentro en el que expresará su ‘interés en Figueruelas’.
El titular de Industria ha remarcado que el Ejecutivo central ‘siempre’ ha apoyado a la industria del automóvil, como hizo a través de un plan de competitividad dotado con 800 millones de euros, de los que una parte fueron para GM Europa y para Figueruelas.
‘Lo seguiremos haciendo’, subrayó Sebastián, al tiempo que agregó que respaldará a esta industria ‘siempre que se mantengan proyectos de inversión a largo plazo, que garanticen la innovación, el futuro y un empleo a largo plazo, con desarrollo industrial y proyectos innovadores’.
Este apoyo, continuó, estará ‘dentro del marco de las ayudas permitidas por la Comisión Europea’, que fomenten la innovación y el desarrollo, y ‘utilizaremos ese margen de maniobra, en la medida de nuestras posibilidades’.
A pesar de reiterar el apoyo del Ejecutivo central a la planta de Figueruelas, Sebastián no concretó cómo podría reflejarse, económicamente, ese apoyo.
Al ser preguntado por la aportación económica que ha comprometido el Gobierno alemán, el ministro recalcó que no se trata de financiación sino de un ‘crédito puente’ para dar liquidez a la empresa y facilitar la segregación de las plantas europeas de su matriz estadounidense.
En este punto, valoró que el haber dado este crédito-puente ‘no le da (a Alemania) ninguna ventaja’ a la hora de mantener sus plantas, sino que ‘aquí las ventajas son la competitividad, la productividad, y los proyectos de futuro, y nosotros ahí tenemos que pelear por estar incluso por delante’, aseveró.
Defensa activa a Figueruelas
Miguel Sebastián defendió que, aunque el apoyo del Ejecutivo central no haya sido ‘tan visible’ en el pasado, ‘sí que hemos estado muy activos, y hemos tenido muchas reuniones con el Gobierno de Aragón’ para abordar la situación de la planta de Figueruelas.
‘El problema —continuó—, era de intervención, porque no sabíamos el futuro’ de la empresa ni existía un inversor claro. Aún así ‘hablamos con todos los candidatos, y ahora se ha concretado uno’, por lo que es ‘el momento de la ofensiva’.
Así, aunque ‘nadie conoce’ aún el plan industrial de Magna, que únicamente ha comunicado que podría haber reajustes al considerar que las plantas europeas están sobredimensionadas, ‘hay que ir perfilándolo y actuar con visibilidad y contundencia’, porque si se tiene en cuenta la productividad y eficiencia de Figueruelas ‘buena parte del trabajo está hecho’, afirmó.
El ministro indicó que en este proceso estarán ‘vigilantes’, para ‘ver la letra pequeña’, y opinó que, a pesar de las dificultades, ‘hay que ser optimistas con el futuro de Figueruelas’. En su opinión, ‘lo peor sería no tener ninguna alternativa’ y ahora, con Magna, ‘tenemos una alternativa industrial y de futuro, y con esa tenemos que trabajar’.
Sobre la intención de Magna de suprimir más de 10.000 puestos de trabajo de las factorías europeas de Opel, Miguel Sebastián señaló que en caso de que la reestructuración que plantea Magna, con quien se reunirán ‘en un futuro’, ‘implique recortes en los puestos de trabajo de las plantas de GM Europa, no puede ser lineal y proporcional’, porque Figueruelas es ‘especialmente productiva y competitiva’.
Por tanto, la fábrica zaragozana ‘no puede necesitar los mismos ajustes que otras plantas menos competitivas y eficientes’, de modo que si hubiera ajustes, éste sería en Figueruelas ‘incomparablemente inferior’ a otras plantas europeas ‘y cualquier gestor industrial de la compañía pensaría lo mismo que yo’.
El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, por su parte, señaló que no se han producido novedades en el caso del aval de 200 millones de euros que el Ejecutivo aragonés se comprometió a dar a General Motors España para asegurar la producción del modelo Meriva en Figueruelas en 2010, un aval que sigue pendiente de firmarse con la compañía, aunque ahora ‘nada es igual’ que en el momento en que se aprobó esa ayuda.