La crisis económica no sólo ha provocado que las ventas de automóviles nuevos desciendan de manera considerable, sino que los seminuevos también recortan el traspaso entre clientes.
Sin embargo hay un segmento que mantiene un crecimiento imparable y es de los vehículos «ganga», esto es, con un precio inferior a los 1.000 €. Según un informe de Autoscout24 España, se han aumentado un 40% las compras por parte de particulares de automóviles viejos, que ciertamente son contaminantes y menos seguros. .
Parece que la incertidumbre económica y laboral están provocando un efecto malo en un parque de automóviles ya bastante viejo. Con todo esto, los más perjudicados son el medio ambiente, que en lugar de achatarrar vehículos de altas emisiones los pone en funcionamiento y los usuarios, con unidades sin elementos de seguridad modernos y capaces de salvar vidas.
