Lo bueno: Audi presenta una nueva generación del A6, cuyo bastidor es un 15% más ligero que su predecesor a pesar de contar con mayor tecnología. Es marginalmente más corto, pero también es mas ancho y bajo. Tiene mayor batalla, y un voladizo frontal menor gracias a colocar la transmisión por detrás del eje delantero, lo cual también ayuda a curar parcialmente el problema del reparto de pesos y del momento polar de inercia intrínseco a la mayoría de los Audi. Lleva más equipamiento de serie que nunca, y además incorpora tecnología para aburrir (por cantidad) en forma de opcionales.
Lo malo: Si bien, como hemos dicho, tiene tecnología para aburrir, su estética puede que también consiga el mismo efecto, pero en otro nivel. Y es que no es otra cosa que la satisfactoria mezcla de elementos conocidos de A8 y A7, conjugados tanto en el exterior como en el interior. Atractivo, intemporal, serio… Puede que sea estas cosas, pero también es «cero rompedor», o «cero vanguardista». Sea como fuere, para gustos los colores, y si es un gran coche, como puedes apostar que lo será, al cliente tipo de estas berlinas le encantará. Si quiere algo «más estético» siempre quedará Jaguar con su XF.
Gallery: Audi A6
Por lo pronto de la gama de motores desaparecen las mecánicas de ocho cilindros, quedando todo articulado en variantes de cuatro y seis cilindros. En el momento del lanzamiento se ofrecen dos propulsores de gasolina, ambos de seis cilindros: el V6 FSI atmosférico de dos con ocho litros y 204 CV (7,4 litros a los 100 km), y el V6 3.0 de 300 caballos con 440 Nm de par (8,2 litros a los 100 km).
Pero los motores que más se venderán, sin duda alguna, serán los diésel. Tres son las variantes que aparecerán en un principio: 2.0 TDI de 180 CV (4,9 litros a los 100 km) y 3.0 TDI en versiones de 204 (5,2 litros a los 100 km) y 245 caballos (6 litros a los 100 km).
A estas opciones mecánicas se añadirá además una variante híbrida de tecnología paralela con el TFSI 2.0 de cuatro cilindros y 211 caballos como motor de combustión, y un motor eléctrico de 45 caballos extra ayudándole, acoplado en el lugar donde iría normalmente el convertidor de par de la transmisión de ocho velocidades tiptronic que lleva el vehículo.
Sus cifras serán de 7,3 segundos en el cero a cien, con un consumo medio de 6,2 litros por cada cien kilómetros y una punta de 238 por hora. Tiene una batería de 1,3 kWh de capacidad en la parte trasera del vehículo, y es sólo tracción delantera. De momento no hay fecha para su comercialización.
En el apartado de equipamientos podríamos escribir un libro. Quédate con lo de siempre: Todo lo imaginable de serie, y luego con opcionales como navegación con tecnología Google, conectividad WiFi con internet móvil, sistema de sonido Bang & Oulfsen (como el de los Aston Martin), sistema MMI con manipulación por gestos y reconocimiento de escritura, y a nivel de chasis, tracción integran quattro con control vectorial de la guiñada.
De momento no tenemos precios, aunque no deberíamos esperar un incremento ostensible respecto al A6 actualmente en comercialización. Tecnológico, sobrio, seguramente fácil de conducir y extremadamente bien acabado. Soso estéticamente, y con todo «ya conocido». Así son los 4,92 metros que ocupa de largo el nuevo Audi A6.