A principios de año Renault presentaba en sociedad la renovada gama del Mégane en sus carrocerías coupé, berlina y familiar. El único integrante en mantener tanto la estética como las mecánicas era el coupé-cabrio, que ahora recibe una actualización que afecta a la oferta de motores.
Estéticamente el descapotable seguirá luciendo como siempre y no podrá disponer de las luces diurnas ni los nuevos paragolpes de las versiones cerradas. Sin embargo tendrá por fin bajo el capó el motor 1.6 dCi de 130 CV, jubilando así al anterior 1.9 dCi de idéntica potencia. Un escalón más abajo quedará situado el nuevo 1.5 dCi de la familia Energy con 110 CV y Stop&Start de serie.
Por ahora no sabemos si también ocurrirá en España pero al menos para los franceses la oferta quedará limitada a los diésel, dejando fuera cualquier opción de gasolina. Del mismo modo también sale del catalogo el 2.0 dCi de 160 CV. Es de esperar que dentro de unos meses se sume el TCe de 115 CV como opción de acceso aunque no está confirmado.