Hasta ahora, Mazda sólo había confirmado del CX-5 su nombre comercial y el año de lanzamiento (recuerda, 2012), dejando en el aire cualquier otro detalle sobre su SUV compacto. Y decimos hasta ahora porque Autocar publica con certeza oficial que este nuevo modelo todocamino compacto estará equipado con un motor diésel Euro 6 de 2,2 litros y un cambio automático de seis velocidades.
Según la revista, dicha combinación dotará al CX-5 de 173 CV y un sugerente par motor de 420 Nm. A pesar de ello, sus consumos serán notablemente contenidos, puesto que su nuevo motor es un 20% más eficiente que el actual 2,2 de la casa.
A esto podemos añadir (o más bien recordar) que el CX-5 hará uso de una plataforma totalmente nueva. A pesar de que hace tiempo se decía que se montaría sobre la base técnica del Kuga aprovechando los lazos que todavía existen entre Mazda y Ford, finalmente el CX-5 reposará sobre una arquitectura modular de nuevo diseño, concebida para apuntalar a casi cualquier coche comprendido entre el Mazda3 y el CX-7, ambos inclusive.
El Mazda CX-5 será una de las numerosas atracciones confirmadas para el Salón del Automóvil de Frankfurt, y allí estaremos el día 15 de septiembre para contarte todos sus detalles.
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