La reducción de consumo y emisiones de un vehículo se puede conseguir por varias vías: Motores más eficientes, aerodinámica más cuidada, trenes de rodantes con menos fricción y menor peso. Audi está dispuesta a añadirse al carro de los fabricantes que buscan, entre otros caminos, el del adelgazamiento. Y es que el constante crecimiento de cada modelo en sus renovaciones ha conducido a todas las marcas a comercializar auténticos barcos pesados de carretera.
En palabras de Heinrich Timm, director del Audi Lightweight Design Center, la próxima generación de su berlina más vendida, el A4, intentarán conseguir una reducción del peso de al menos 150 kilogramos de media para todas las versiones. Puede no parecerte mucho, pero teniendo en cuenta que hasta la fecha cada nuevo modelo suponía un incremento de peso de un valor semejante, esta medida es digna de aplaudir.
Para conseguirla, la casa de los cuatro aros trabajará en frentes como el uso de aleaciones ligeras, composites y nuevas formas de construcción que faciliten mayor rigidez estructural a un menor peso.