Ya se puede encontrar la cuarta generación del Honda CR-V a la venta, parte desde un precio de 24.400 euros, dotado con el propulsor diésel de 120cv de potencia. Con una cilindrada de 1,6 litros de cubicaje, un motor que respalda la eficiencia del Honda CR-V. Emitiendo bajas emisiones de Co2 a la atmósfera. Con el 1.6 i-DTEC sólo se puede optar por la tracción delantera. Ideal para un uso en asfalto, con bajos consumos de carburante.
Si queremos abandonar el asfalto, la opción más indicada es el propulsor 2.2 i-DTEC de 150cv de potencia. Que también cuenta con un bajo consumo y mayor PAR en bajas vueltas.
Con esta motorización en el Honda CR-V se puede optar por la caja de cambios manual de 6 relaciones o la automática, que proporciona una mayor comodidad, sobre todo, en un uso más urbano.
El tamaño del Honda CR-V 2013 es casi idéntico al de su predecesor. Pierde 5 milímetros, quedando con una longitud de 4,57m. También es menos alto, 30 milímetros menos. La altura libre no presenta variaciones.
El interior conserva el buen tamaño, y la versatilidad que hace del CR-V un vehículo muy interesante para familias con hijos. Cuenta con unas plazas traseras generosas. Dotadas de anclajes ISOFIX.
El maletero, por su parte, cuenta con una alta capacidad de carga disponible, 589 litros. 65 más que el anterior CR-V. El acceso es práctico y dispone de fondo plano.
Fuera del asfalto el CR-V se desenvuelve correctamente, dispone de tracción 4WD en las versiones más potentes (2.2 i-DTEC, 2.0 i-VTEC). Imprescindible para caminos de tierra. Donde el CR-V no presenta problemas.
Dispone de cinco niveles de equipamiento, desde el “Comfort”, el más asequible, pasando por el “Elegance”, “Lifestyle”, “Executive”, “Luxury” e “Innova”. Todo ellos disponen de serie de climatizador bizona, ayuda al arranque en pendientes, programador de velocidad y pantalla del salpicadero con toma USB y en color.
Dentro del equipamiento opcional están los faros de xenón, techo panorámico de cristal, el navegador, la cámara trasera, el sistema de entrada al vehículo y arranque sin llaves, y por último el mecanismo de cierre automático del portón del maletero.
El Honda CR-V también cuenta con las últimas novedades electrónicas, como el “Lane Keeping Assist System”. Que gracias a un sistema electromecánico impedirá que nos salgamos del carril, ejerciendo fuerza sobre la dirección de hasta un 80%. El conductor debe ejercer el 20% restante si quiere permanecer en el carril.
Hay otros sistemas de ayuda a la conducción que ya estaban presentes en el anterior Honda CR-V, como el programador activo. Funciona entre 30 y 180 km/h.
El CR-V con el 1.6 i-DTEC homologa un consumo medio de 4,5 litros cada 100 kilómetros recorridos, el 2.2 I-DTEC de 5,6 litros a los 100km.
El motor de gasolina 2.0 i-VTEC necesita 7,6 litros (consumo homologado por la marca) de carburante para recorrer 100km.
Redacción de PacoCostas.com