La pantalla táctil y los sensores inteligentes son la clave del futuro
Volkswagen presenta en CES 2015 de Las Vegas el primer vehículo compacto con control por gestos y completamente equipado con los controles del mañana. En este coche, el elevado rendimiento del ordenador, la brillantez de los controles y el preciso reconocimiento por gestos emergen para configurar una nueva generación en lo que a interfaz se refiere.
Gracias al control por gestos, la pantalla de infoentretenimiento reconoce un simple movimiento de la mano permitiendo la interactuación del hombre y la máquina como una sola entidad. Siguiendo una estrategia constante, Volkswagen está extendiendo el concepto de control intuitivo más allá de la pantalla táctil y hacia la tercera dimensión.
Cinco aspectos clave del Golf R Touch:
1. El sistema de infoentretenimiento con el nuevo control por gestos revolucionará el manejo del usuario en cada segmento del vehículo.
2. El Golf R Touch ofrece un manejo prácticamente sin botones.
3. El cuadro de información permite personalizar los instrumentos.
4. Pantalla táctil más cómoda y segura para controlar la temperatura, biblioteca multimedia y funciones del vehículo.
5. El conductor puede configurar y personalizar la cabina (controles, iluminación, gráficos y sonido).
Manejo intuitivo. Volkswagen siempre ha luchado para desarrollar unos controles y sistemas de información simples e intuitivos. Al final del siglo pasado, ya era una evidencia que la cantidad de información facilitada en los vehículos aumentaría exponencialmente. En este contexto, era imprescindible desarrollar una estrategia integral de operaciones que evitara sobrecargar al conductor. Además, los sistemas operativos del mañana ofrecerán un mayor entretenimiento gracias a bibliotecas multimedia, noticias de actualidad y comunicación con el automóvil. Estos eran los requerimientos del futuro. El funcionamiento de los dispositivos complejos de infoentretenimiento, así como sus menús, debía ser organizado de forma clara y fácil de entender mientras, al mismo tiempo, proyectaba una alta calidad de imagen. Para lograr este objetivo, Volkswagen ha reunido a un equipo multidisciplinar de diseñadores y especialistas en ergonomía y electrónica que ha desarrollado sistemas de interacción directa. En consecuencia, la marca ha preferido la pantalla táctil desde hace años, y en un Volkswagen no hay controles indirectos. Como resultado, el fabricante ha sido durante mucho tiempo un referente en lo que a interfaces de usuario se refiere, y así seguirá en el futuro, tal y como lo está demostrando con el Golf R Touch en CES 2015 celebrado en Las Vegas.
Manejo sin botones. El equipo de desarrollo del Golf R Touch persiguió el objetivo de desarrollar un concepto de interior e infoentretenimiento que cumpliera unos requisitos aparentemente contradictorios. A pesar del continuo crecimiento de la complejidad y el número de funciones, se intentó reducir las distracciones para el conductor, al mismo tiempo que se ofrecía un nivel máximo de personalización y manejo intuitivo. Para ello, se creó un vehículo en el cual prácticamente todos los controles están implementados a través de pantallas y paneles táctiles, configurando así una cabina prácticamente sin botones. El Golf R Touch está equipado con tres pantallas: la pantalla táctil de 12,8 pulgadas del sistema de infoentretenimiento (resolución: 2560 x 1700 píxeles), un centro de control (8 pulgadas con retroalimentación táctil) situado debajo de ella para el vehículo, el control de temperatura y las funciones de los medios (resolución: 800 x 480 píxeles), y una pantalla de información activa (instrumentos digitalizados) en formato de 12,3 pulgadas (resolución: 1920 x 720 píxeles).
Un aspecto a destacar del Golf R Touch son sus nuevos controles. El módulo del techo es un claro ejemplo: cuando se acerca la mano, muestra un símbolo en la pantalla como si de magia se tratara; cuando el usuario toca su superficie, un menú se muestra simultáneamente en la pantalla táctil de 12,8 pulgadas del sistema de infoentretenimiento con diversos ajustes tales como «abrir / cerrar el techo solar». El aspecto clave es que se puede acceder a las funciones importantes del techo a través de gestos en el espacio frontal del panel de control. Por ejemplo, un movimiento de deslizar hacia el parabrisas permite cerrar el techo solar, mientras que el mismo movimiento hacia el lado opuesto lo abre. Los ajustes del asiento también son inteligentes. En cuanto la mano de una persona se mueve lateralmente en el asiento del conductor o en el asiento delantero del pasajero, el sistema de detección de proximidad lo reconoce. En la gran pantalla táctil, se muestran consejos útiles e información sobre el control del usuario. Naturalmente, los asientos se pueden controlar plenamente a través de la pantalla táctil.
Sistema de información y entretenimiento – pantalla táctil con control por gestos
Los controles incluyen control deslizante. Como se ha mencionado, el control por gestos está integrado en la pantalla táctil de 12,8 pulgadas de la consola central. Y Volkswagen está llamando «control de gestos» a la tecnología presentada en Las Vegas. Además, el sistema tiene sensores de proximidad de alta resolución. Una forma similar de estos sensores ya se está utilizando en el Golf y en otros modelos. Debajo de la pantalla de infoentretenimiento, hay un control deslizante táctil, que en el Touch Golf R reemplaza al clásico pomo giratorio. La barra deslizante, que está equipada con un carril de guía para el dedo, además de sensores de proximidad e iluminación LED, se utiliza para ajustar de manera intuitiva y precisa ajustes como el volumen. Un detalle ingenioso es que la barra deslizante puede reconocer el número de dedos utilizados: cuando se utiliza un dedo, el volumen de audio se controla; con dos dedos, el volumen de navegación; y con tres, el volumen del teléfono. Además, el esquema de color de la iluminación ambiental y la unidad de infoentretenimiento, el ajuste de graves y agudos, y el equilibrio y balance de sonido se establecen también por control deslizante.
Apariencia y sensaciones de la pantalla táctil. Más que nunca, la pantalla del sistema de infoentretenimiento se está convirtiendo en el punto de control central de la cabina. La limpia integración de la pantalla en el centro de la consola ofrece un aspecto de alta gama, a lo que contribuye el hecho de que casi no hay botones. Esto le da a la consola un aspecto limpio y bien organizado. Gracias a los sensores de proximidad, también hay un modo de información muy claro y un modo intuitivo de operaciones con controles a un tamaño optimizado. La densidad de información se controla de forma inteligente con sensores de proximidad; además, el innovador control de gestos se utiliza para activar y operar otros niveles del menú a la velocidad del rayo.
Control por gestos de la pantalla táctil. El control 3D de los gestos en el espacio es posible gracias a una cámara 3D montada en el módulo de techo, que hace que el manejo sea más sencillo que nunca. Una persona inicia sesión en el sistema extendiendo los dedos de una mano, lo que evita la activación involuntaria de una función con un movimiento de la mano. Los controles se seleccionan usando el dedo índice -moviéndolo en el aire, por supuesto-, la función es confirmada por un empujón de un botón virtual con el dedo índice y la entrada de un gesto se finaliza cerrando los dedos de la mano.
Personalización de la pantalla táctil. La propia pantalla se puede personalizar ampliamente. Igual que en los teléfonos inteligentes y las tabletas se pueden presentar en la pantalla varias ventanas con contenidos como «tiempo» o «librería multimedia» (también personalizados). Además, se pueden integrar fotos o gráficos como fondos en un instante. Las ventanas individuales se pueden mover o cambiar de tamaño a través del tacto. Por ejemplo, si un mapa de navegación está activo en segundo plano, se adapta automáticamente a la nueva disposición. El coche en sí también se puede representar en 3D (interior, exterior, abierto o cerrado, luces encendidas o apagadas, ventanas abiertas o cerradas) y puede girarse por gestos. El menú de información proporciona el estado en tiempo real del vehículo e incluye animaciones explicativas si es necesario.
Iluminación personalizada. Por último, pero no menos importante, el color dominante de la iluminación de pantalla -lo que se conoce como el color de decoración HMI- se puede ajustar mediante el control deslizante táctil de forma similar a la iluminación ambiental. También incrustada en esta puesta en escena de color se encuentra la apertura/arranque y aparcamiento/cierre del Golf R Touch: cuando el coche se abre, el interior cobra vida con toda la cabina y la iluminación ambiental; cuando el coche está aparcado, entra en el modo de espera. La iluminación ambiental tiene una profundidad de color de 24 bits, lo que permite la representación de 16,7 millones de colores.
Instrumentos – Visualización activa de información
Instrumentos personalizables. Del mismo modo que la pantalla táctil de infoentretenimiento, la pantalla de inicio de 12,3 pulgadas también se puede personalizar, ya que todos los instrumentos e indicadores se generan digitalmente. Internamente, los desarrolladores distinguen entre «fase pequeña» y «fase grande». Dependiendo de la configuración, la «fase pequeña» podría contener el tacómetro a la izquierda (con indicador de marcha en el medio y temperatura del motor en la parte inferior), un velocímetro analógico generado digitalmente a la derecha (con indicador digital en medio y de combustible en la parte inferior), y entre ellos, la pantalla multifunción con todos los menús concebibles como los mensajes de tráfico o instrucciones de navegación. Debajo de ello, siempre aparecen de forma inamovible el odómetro/odómetro de viaje y el reloj. En la «fase grande», la pantalla multifunción maneja tareas como la visualización del mapa del sistema de navegación. A la izquierda, en lugar del tacómetro, la pantalla puede mostrar mensajes sobre el tráfico o información del ordenador de a bordo (como el ahorro de combustible y la temperatura del motor); a la derecha, en lugar del velocímetro puede haber una portada (con el artista y canción) de la biblioteca multimedia, así como la fecha y la temperatura exterior. En este caso, permanecen intactos el indicador de marcha en la parte inferior izquierda y la velocidad del vehículo, además del medidor de combustible en la parte inferior derecha.
Consola central
Innovadora. Situada debajo de la pantalla principal de 12,8 pulgadas, se encuentra el Centro de Control de 8 pulgadas para el control climático, la biblioteca multimedia y las funciones del vehículo. Mientras que las teclas físicas se utilizan generalmente para controlar las funciones del vehículo y el control climático, en este caso se utilizan controles táctiles con actuadores especiales. Una innovación absoluta es que las transiciones de un botón táctil de la pantalla táctil a otro botón ahora se pueden sentir realmente. El uso de un sensor especial permite al Centro de Control medir la fuerza de la acción del usuario, lo que permite que las funciones se activen a través de un punto de presión, del mismo modo que sucede con los botones mecánicos. Estos refinados detalles muestran cómo de maduro es el concepto general. En un Volkswagen, aquellos controles en las pantallas táctiles que están muy alejados del campo periférico visual del conductor se pueden sentir con el tacto, lo que reduce las distracciones de manera significativa.
Los asientos delanteros tienen «bass shakers». La música a bordo del Golf R Touch también se puede experimentar en el nivel más elemental gracias a los llamados «bass shakers» -integrados en los asientos del conductor y acompañante- ofrecen unas ondas de sonido muy notables. La música del sistema de sonido se experimenta con mayor intensidad, tanto a nivel físico como de percepción auditiva.
Puesta en escena de competición
La electrónica enfatiza la deportividad. El Golf R Touch está equipado con el motor de 292 CV del nuevo Golf R en Estados Unidos. Por supuesto, cualquier otro sistema de transmisión podría ser instalado en este Golf, pero, dado que el nuevo motor R sirve como base aquí y que el coche se ha configurado de forma dinámica en consecuencia, se proporciona una función especial de «puesta en escena de competición». Esta función se activa a través de la gran pantalla táctil de 12,8 pulgadas y simula una amplia variedad de parámetros, creando una especie de prueba de conducción en parado. El sonido del motor se reproduce a través de los altavoces del sistema durante la aceleración, las imágenes de la unidad se proyectan en la pantalla táctil, todos los datos relevantes del vehículo se muestran en la pantalla de información activa, el coche aumenta las vibraciones del chasis a través de los actuadores de los asientos y, finalmente, la iluminación se modifica en el interior. La puesta en escena de competición ilustra cómo ahora se pueden personalizar y simular electrónicamente más parámetros que nunca.