El Gobierno francés estudia una eliminación ‘progresiva’ de las ayudas de 1.000 euros decididas en diciembre de 2008 para incentivar la venta de coches, según adelanta el nuevo ministro francés de Industria, Christian Estrosi, en una entrevista que hoy publica el diario económico galo ‘Les Echos’.
‘Las primas para el desguace no podrán mantenerse indefinidamente’, advierte el titular de Industria, que evoca los ‘efectos perjudiciales’ a largo plazo de dispositivos similares puestos en marcha por los gobiernos de Edouard Balladur y Alain Juppé. ‘A partir de ahora hay que pensar en una suspensión progresiva. Estamos trabajando en ello’, añade Estrosi.
El presidente de Renault, Carlos Ghosn, calcula que las ayudas gubernamentales suponen entre el 5 por ciento y el 10 por ciento de la demanda actual y teme que el sector del automóvil no salga de la crisis antes de 2011 por lo que ha pedido que la eliminación de las primas se haga de manera paulatina.
Estrosi, por su parte, asegura que quiere primero estar seguro de que los fabricantes de automóviles no se limitan a ‘gestionar los stocks’ y dice que los libros de pedidos están ‘llenos’ pero que los concesionarios no reciben mercancía porque la producción no sigue adelante.
Por otro lado, considera que el sector industrial no ha salido todavía de la crisis y que una nueva remesa de Pymes podría tener dificultades en septiembre. Por eso, entre sus prioridades se ha fijado reestructurar los sectores que tienen más problemas coyunturales y propondrá al presidente francés proyectos estratégicos en innovación.
El ministro francés ha negado que la futura ‘ecotasa’ penalice a la industria, al considerar que, más bien al contrario, con el llamado crecimiento verde se pueden generar 50.000 millones de euros y crear 280.000 empleos de aquí al año 2020. ‘Más allá de esto, mi prioridad es gravar los productos importados que no respeten nuestras normas sociales y medioambientales’, advierte.