Mientras se especula con el futuro de Massa y su posible sustituto, Ferrari se ha salido por la tangente, atando a Fernando Alonso hasta 2016 en una mutua muestra de compromiso por ambas partes, confianza y ganas de seguir trabajando juntos. Con muchas evoluciones por estrenar en Barcelona, parece que Alonso también quiere asentarse en Maranello, aunque este año tampoco tenga un coche ganador para atacar el mundial.
El español con este gesto también parece estar seguro de que, tarde o temprano, los de Ferrari serán capaces de darle un coche capaz de ganar mundiales.