Mucho habíamos criticado los medios de comunicación especializados en el mundo del motor la ausencia del control de estabilidad en la última generación del Kia Picanto. Que no pudiera llevarlo se debía a que el departamento de marketing encargado de configurar los acabados no lo había considerado oportuno, algo que ahora han corregido y este elemento se añade como equipo opcional.
A partir de esta misma semana todos aquellos interesados en uno de los nuevos Picanto -tanto en carrocería de tres como de cinco puertas- podrán llevarse a casa una unidad con el control de estabilidad ESP, pagando eso sí los 450 € que la firma pide por él. Pese a que es un modelo pensado para la ciudad, nosotros creemos que bien merece la pena desembolsar esa cantidad extra.
Gallery: Kia Picanto 2011