- Agarre en superficies deslizantes: gracias a la tracción integral con reparto vectorial del par motor.
- Tan luminoso como el día: faros delanteros IntelliLux® y LED.
- Completa visibilidad desde el principio: calefacción auxiliar y parabrisas calefactable.
- Temperatura agradable: volante, asientos delanteros y traseros calefactables.
Las noches son cada vez más largas, se suelen producir heladas y las carreteras están resbaladizas. Hace falta tiempo para adaptarse a las temperaturas invernales y a las condiciones de la carretera; y aquellos que desean sentirse tranquilos en estas condiciones conducen un Opel. Con sus numerosas características de seguridad y comodidad, los automóviles del fabricante alemán ayudan a que la conducción en invierno sea más segura y más relajada. Con la tracción integral adaptativa (AWD), los faros matriciales IntelliLux LED® y la calefacción en el volante, los coches Opel están preparados para las condiciones más duras que el invierno puede ofrecer.
Tener buen agarre – con los neumáticos adecuados y control de tracción inteligente
Los neumáticos de invierno – que son obligatorios en la época invernal en muchos países europeos y recomendables en todos – aseguran una mejor adherencia a la carretera y distancias de frenado más cortas en agua o la nieve. En todos los neumáticos, una profundidad de la banda de rodadura de cuatro a cinco milímetros y una antigüedad de no más de seis inviernos es vital.
La tracción correcta es tan importante en superficies resbaladizas como las ruedas adecuadas. Dependiendo del modelo, Opel ofrece sistemas de control de tracción inteligentes desde el IntelliGrip hasta la tracción integral adaptativa con reparto vectorial del par motor. Con el sistema IntelliGrip del nuevo Opel Grandland X, el conductor puede elegir entre cinco modos, incluyendo específicos para barro y nieve. El sistema IntelliGrip adapta la distribución del par a las ruedas delanteras, permite el deslizamiento cuando es necesario y ajusta el mapa de control del pedal del acelerador. Cuando se combina con la transmisión automática, IntelliGrip optimiza los puntos de cambio a la situación de conducción predominante, aumentando aún más la seguridad y la comodidad de conducción.
Alternativamente, los clientes se pueden decidir por la tracción integral a las cuatro ruedas para moverse seguros sobre superficies resbaladizas. Tienen, por ejemplo, el súper ventas Opel Mokka X SUV, para lograr un gran agarre barro, nieve o hielo: el sistema adaptativo AWD distribuye el par motor según sea necesario en fracciones de segundo, desde un 100% de tracción delantera hasta 50:50 entre los ejes delantero y trasero, asegurando así una tracción máxima en todas las condiciones. La tracción a las cuatro ruedas siempre está disponible unos segundos tras cada arrancada, tan pronto como el conductor presiona el pedal del embrague, evitando que la rueda patine en el momento de iniciar la marcha. Una vez en marcha, todo el par va a las ruedas delanteras, a menos que las condiciones de la carretera o de tracción requieran una distribución diferente.
Para los más altos niveles de rendimiento y eficiencia, el nuevo Opel Insignia utiliza un sistema adaptativo de tracción total con reparto vectorial del par motor y un módulo de transmisión trasero que tiene un sistema de doble embrague sin diferencial. El sistema de tracción total del Insignia puede aplicar el par motor a una o a ambas ruedas traseras de forma independiente, permitiendo repartir vectorialmente el par en todo el rango de prestaciones del coche. En curvas cerradas se traslada más par a la rueda exterior, induciendo el giro sobre el eje vertical (rotación) – así, el Insignia gira con mayor precisión, respondiendo de forma más espontánea a las solicitudes del conductor. Esta utilización inteligente de la distribución del par motor – también llamada “amortiguación rotacional” – da como resultado un comportamiento más neutro del coche, haciéndolo más estable y más preciso para el conductor.
¿En la oscuridad? Convierta la noche en día con los faros IntelliLux LED®
Las condiciones de humedad, nevadas y heladas también se acompañan habitualmente de oscuridad durante la mayor parte del día durante los meses de invierno. Sin embargo, Opel tiene excelentes remedios: los faros adaptativos con tecnología completamente LED (por ejemplo, en el Mokka X o el Grandland X) o faros adaptativos matriciales IntelliLux LED®, como en el caso del Astra y el nuevo Insignia. La matriz adaptativa de segmentos LED (de 32 elementos, 16 en cada faro en la última generación del Insignia) se adapta a la situación predominante en la carretera y permite conducir con luces largas, sin deslumbrar a otros usuarios de la vía. También permite ver a personas o animales que pudieran encontrarse cerca de la carretera con mucha más antelación que con la luz de cruce convencional.
Inicie su viaje con una cálida comodidad, con las opciones de deshielo y calefacción de Opel
En invierno, una buena idea es planificar un tiempo adicional para deshacerse de la nieve y el hielo en el automóvil antes de iniciar el viaje. Los clientes de Opel no necesitan molestarse en ello si su automóvil tiene un sistema de calefacción independiente a bordo. Gracias al temporizador de control remoto o a la programación automática según los sensores de temperatura, el habitáculo se encuentra acogedor antes de que alguien entre en el vehículo, los cristales de las ventanillas están libres de hielo y el motor se calienta. La calefacción independiente no es sólo una característica de confort. Con un motor ya caliente, el aceite y el catalizador alcanzan su temperatura de funcionamiento más rápidamente, el desgaste y las emisiones en el arranque se reducen. En los vehículos comerciales ligeros Opel Vivaro y Movano, así como en los turismos Corsa, Astra, Cabrio, Mokka X, Insignia y Zafira, está disponible el sistema de calefacción estacionaria independiente instalada de fábrica.
Igualmente útiles son los espejos exteriores con calefacción y el parabrisas térmico, como en el Opel Insignia y el Grandland X. En lugar de tener que rascar el hielo, el parabrisas se descongela rápida y silenciosamente con un fino elemento calefactor que se activa con sólo pulsar un botón. El parabrisas térmico también evita el empañado en condiciones de alta humedad, mejorando la seguridad y la visibilidad. El sistema se desconecta automáticamente cuando ya no es necesario y puede activarse de nuevo volviendo a pulsar el botón.
Los vehículos Opel también tienen características adicionales para hacer que el interior sea acogedor. La mayoría de los modelos, por ejemplo, ofrecen un volante con calefacción. El conductor tarda menos de un minuto en sentir el calor en sus manos.
Cuando se trata de bienestar, los asientos ergonómicos AGR con calefacción, regulables y certificados por los especialistas en dolencias de la espalda de Aktion Gesunder Rücken e.V. son la guinda del pastel. Los asientos con múltiples regulaciones permiten a todos encontrar la posición ideal para sentarse gracias a las numerosas funciones de ajuste. Los asientos opcionales Premium AGR aseguran un viaje relajante gracias a su combinación única de ajuste del apoyo lateral, función de masaje y calefacción en invierno o ventilación refrigerante en verano. Como un lujo adicional, los pasajeros en los asientos traseros exteriores con calefacción del Opel Astra, Grandland X e Insignia, también se benefician de una calidez adicional.
Los conductores y pasajeros pueden de esta manera, simplemente entrar en su Opel sin necesidad de abrigos de invierno o guantes. Gracias a la variedad de opciones de calefacción, pueden sentirse cómodos y seguros desde el mismo inicio del viaje. Y ni la libertad de movimiento ni el abrochar el cinturón de seguridad están dificultados por la ropa gruesa.