El alemán protagonista de la historia que te vamos a contar seguro que no vuelve a tener la misma ocurrencia. Estaba decidido a comprarse un Audi A3 Cabrio, y fue al concesionario con sus 23.000€ en efectivo, dispuesto a tener una toma de contacto con el coche antes de cerrar el trato.
Descuidado como pocos, no se le ocurrió mejor idea que dejar el dinero en la banqueta de atrás, descapotar el coche, y salir a la autopista a probar cómo se las gastaba el A3 a toda velocidad. ¿Resultado? Lluvia de billetes por toda la autopista.
Cuando el chaval llegó al concesionario, no le quedaba un solo billete en el asiento (lógico, ¿no?). En todo caso, estuvo listo, y avisó a la policía, que decidió cortar el tramo de autopista utilizado por este caballero durante su aventura. Tras 20 minutos, los agentes de la ley lograron recuperar 20.000€. Sin duda, un mal menor perder 3.000€, dadas las circunstancias.
Lo que no sabemos es si, finalmente, este pobre hombre pudo comprar el Audi, o si la falta de esos 3.000€ le dejó con las ganas. En nada tendremos que pedir que los fabricantes de descapotables coloquen alguna pegatina más en el salpicadero «no deje dinero suelto en los asientos si conduce a techo descubierto».
