El objetivo de ventas del Giulietta en su primer año de comercialización completo es de 100.000 unidades. Según comentó en el Salón de París Harald J. Wester, director ejecutivo de la casa italiana, los pedidos ya superan las 30.000 unidades (¡dos terceras partes de ellas en Italia!), lo que les hace confiar que se superarán con creces dichos objetivos.
Las ventas del compacto italiano están superando por tanto las expectativas de Alfa, lo cual es una buena noticia para la supervivencia de la misma bajo el paraguas de Fiat. Según Wester, si el coche se vende bien es porque es un producto más maduro que el 147 en su momento, con un atractivo más global y menos específico (se acabaron los años en los que comprábamos un Alfa por razones deportivas y emocionales). La nueva estrategia de Alfa puede no convencernos a los alfistas, pero parece que económicamente es la más viable. Veremos si sigue así el camino de la casa del biscione.