En España, el automóvil genera un 11 por ciento del total de emisiones de CO2, tantas como el sector de la ganadería, pero por debajo de sectores como el de la energía o la industria. Sin embargo, el coche está muy lejos de respetar el compromiso de Kyoto.
Las emisiones de CO2 provenientes del automóvil han crecido en España de una forma muy destacada: cerca de un 80 por ciento entre 1990 y 2006 a un ritmo superior a la media del 50 por ciento, y muy por encima del 15 que el Protocolo de Kyoto marcaba para España en el horizonte de 2010. Según un informe elabora por el Real Automóvil Club de Cataluña (RACC), en España, el coche genera un 11 por ciento del total de emisiones, tantas como la ganadería, pero por debajo de sectores como el de la energía o la industria. Según cálculos estimativos, para compensar todo el CO2 que se emite en España durante un año harían falta 7 veces más bosques de los que actualmente tenemos.
Calidad del aire
Según la Agencia europea del Medio Ambiente, en el año 2000 se produjeron en Europa 370.000 muertes prematuras por los contaminantes que produce el coche, siete veces más que las muertes por accidente de tráfico. El RACC asegura que una de las medidas que habría que acometer es el de la ‘descarbonización’ del automóvil, es decir, una reducción de las emisiones de CO2 por kilómetro recorrido. Para ello, habría que mejorar la oferta de la eficiencia de los vehículos y apostar por las energías alternativas.
Por otra parte, el club afirma que habría que rediseñar el actual sistema de fiscalidad. ‘Se propone una modificación del impuesto de circulación y una equiparación progresiva de la tributación específica del gasoil y de la gasolina’.
