Si has llegado hasta este artículo es porque tu motor ha sufrido una avería seria relacionada con la rectificación de culatas y motores. Por lo general este tipo de averías tienen buena solución, permitiendo que el motor quede en plena forma y pueda, de nuevo, ser usado sin mayor problema.
¿Por qué hay que rectificar una culata o un motor?
Existen varios tipos de averías diferentes que hacen que, tanto la culata, como el motor pierdan lo que se llama el plano, es decir, la parte que une la culata con el bloque motor. Esta parte plana, dependiendo del material, actualmente por ligereza, más aluminio, que hierro, como eran antiguamente, se deforma y aun usando la necesaria junta de culata tiende a perder líquidos del motor, gases e incluso presión.
Por lo que el uso del motor no es el más adecuado. Puede causar pérdidas de potencia muy acusadas, mayor consumo de combustible, perdidas de aceite, contaminar el sistema de refrigeración del motor, creando otra avería.
Este tipo de avería surge, normalmente, por un exceso de temperatura en el motor, haciendo que los materiales como el aluminio o el hierro sufran y en las partes de unión del bloque motor pueda existir una alteración que haga que no encajen perfectamente entre si las piezas.
Coloquialmente estamos hablando de un calentón del motor, a mayor tiempo pase el motor a una temperatura excesiva, es decir, por encima de los 100º de líquido refrigerante, mayor será el riesgo de padecer, como se dice también coloquialmente, “junta de culata” o rectificado de la misma, por sobrecalentamiento y destemplado del metal, que se dobla, incluso visiblemente y debe ser rectificado para volver a crear el plano, para que así pueda encajar y sellar perfectamente con el bloque motor.
De igual modo, la parte del bloque motor deber ser también tratada y rectificada para que el plano en ambas piezas sea perfecto. Hecho esto, el motor puede ser, como decíamos, usado de nuevo sin presentar ninguna anomalía posterior como mayor consumo de combustible o perdida de potencia.
¿Cómo saber si mi motor necesita ser rectificado?
Existen diferente métodos para averiguar si el motor de tu coche muestra síntomas de tener mal la culata o el bloque motor y necesita un rectificado. Por lo general los síntomas son los mismos que si la junta de culata, pieza que hace de sello entre ambas partes, está en mal estado.
La prueba más evidente es que el coche se calienta, es decir, sube de temperatura de manera muy rápida y consume el líquido refrigerante también en el proceso. Es claro indicativo de que el motor no funciona bien y debe ser revisado.
En casos más extremos puede que incluso el aceite del motor pase al sistema de refrigeración como hemos comentado párrafos atrás. Puedes observarlo si en el bote de expansión del líquido refrigerante ves que el líquido no está translucido y algo denso flota, aceite.
También puede suceder al revés, que al aceite del motor se esté filtrando líquido refrigerante, pudiendo ocasionar una avería muy costosa al hacer que el aceite vaya perdiendo su capacidad lubrificante lo que terminara en rotura del mismo.
De igual modo que pueden pasar los líquidos, puede pasar la propia compresión de los cilindros, es fácil de detectar en el refrigerante del motor, ya que se pueden observar hasta burbujas en los casos más severos.
¿Se puede prevenir una avería así?
Un buen mantenimiento, el aconsejado por la marca, con el cambio de líquidos; aceite, refrigerante y etcétera, hará que tu motor se encuentre en plena forma. Pero si lo que te preguntas es si puedes hacer algo para prevenir, por ejemplo, un calentón del motor, no hay nada seguro. Puedes tener el mantenimiento más riguroso de tu coche y que de un día para otro falle el termostato y la temperatura se eleve hasta producir la avería.
O que falle cualquier otra pieza del sistema de refrigeración, como un manguito o el radiador. Es una lotería y nunca se sabe cuándo puede suceder, lo que está claro es que buen mantenimiento y sobre todo en el momento que toca, puede hacer que tu coche, el próximo verano no sea el que se quede tirado en una cuneta con el motor averiado.
Y si esto sucediera, ya sabes que existe una solución, rectificado de culata o motor, depende de la avería. Incluso hasta reconstrucción del motor si fuera necesario. Todo se puede reparar si acudes a personal cualificado y profesional. Dándole así, una segunda vida a tu motor, y a tu coche, con un ahorro considerable si se compara con la compra de un motor nuevo.