Los citroneros más puristas ya pueden taparse los ojos o mirar para otro lado, porque la marca de sus amores no sólo pretende recuperar la denominación DS con un polivalente derivado del nuevo C3, sino que encima piensa promocionarla con su propia línea de accesorios.
Como MINI, y otras tantas compañías «chic», el fabricante galo venderá diversos complementos con el logo de su nueva submarca, dirigidos principalmente a una clientela joven y supuestamente sin grandes aflicciones económicas (aunque tampoco creemos que se vayan a sobrar con los precios). Por lo poco que vemos, habrá bolsos, gafas de sol, maletas, cinturones, un smartphone personalizado (a primera vista diríamos que fabricado por Samsung) y hasta una tabla de snow. En defensa de Citroën, hemos de decir que al menos se han esforzado en los diseños, no como otros fabricantes que deberían dedicarse exclusivamente a lo suyo…
