Al igual que ha sucedido en Portugal, Francia y Alemania, Italia se une a las ayudas directas para la adquisición de automóviles nuevos que sean los encargados de sustituir a uno viejo, en este caso, que no supere la normativa Euro2.
Las ayudas serán de 1.500 € al achatarrar un automóvil viejo y cambiarlo por uno nuevo que emita menos de 140 g/km de CO2 en gasolina y 130 g/km de CO2 en diésel. Para híbridos, eléctricos y alimentados con gas natural, también tendrán 1.500 € de descuento. En el caso de los comerciales, la suma sube a 2.500 €.
Lo más interesante es que no se han olvidado de las motos y todas aquellas viejas que no superen la normativa Euro1 y sean sustituidas por una nueva Euro3 y de hasta 400 cm3, recibirán 500 euros de ayuda.
Sin duda son buenas noticias y aunque en Francia y Alemania han sido todo un éxito los planes de ayuda, el mercado italiano es algo más complicado. Sólo en Enero el descenso en las matriculaciones ha sido superior al 30% y en los próximos meses los expertos no tienen claro que pueda mejorar el panorama.