La firma de Ingolstadt acaba de presentar una actualización o puesta al día de su buque insignia: el Q7. Llegará a los concesionarios en verano con numerosos retoques estéticos y una gama de motores más eficiente. Además, todos los propulsores incorporan un sistema ‘similar’ al Kers de la Fórmula 1: la inercia de las frenadas y de las aceleraciones se transforma en energía que se almacena en la batería, lo que permite reducir las emisiones de CO2.
A principios de 2006 Audi entró en el segmento de los todocaminos de lujo con el Q7. Ahora, tres años después, la firma de Ingolstadt renueva su buque insignia introduciendo algunos retoques estéticos y una gama de motores más eficiente.
Respecto a los retoques estéticos, estos se pueden calificar de ligeros. De hecho, tenemos que comparar las fotografías de un Q7 ‘antiguo’ con otro remozado para apreciar los cambios. Desde un punto de vista de frontal, la parrilla tiene ahora mayor presencia.
Para lograr esto, Audi ha dado un mayor volumen a línea cromada del marco, ha pintado de negro las barras longitudinales y ha dado mayor importancia a las verticales. A todo ello se suman unos paragolpes, pintandos en gris o negro según el color de la carrocería, y rediseñados en su parte inferior. Además se ha incluido bajo el paragolpes un protector para los bajos del vehículo con unas poderosas nervadutas.
Audi también ha incorporado en esta puesta al día del Q7 diodos leds en los grupos ópticos. Estos leds presentan forma de U en los grupos ópticos y sirvan para la iluminación diurna. También se han incluido leds en los intermitentes. Respecto a los faros el Q7 podrá incluir faros halógenos o bien otros con luces de xenón de cruce, de carretera y especiales en autopista, además de luces de giro y de curva.
Siguiendo con los cambios, y ahora analizando los laterales del vehículo, comprobamos cómo Audi ha incorporado unas molduras laterales de nuevo diseño. Asimismo, también se han incluido nuevos diseños para las llantas. Por último, la zaga del Q7 también presenta ahora un estilo más innovador con unos leds que ofrecen nuevos diseños a los faros y unos protectores de bajos con nervaduras sobredimensionadas. Cuatro nuevos colores -blanco, gris, marrón y beige- cierran la lista de cambios del nuevo Q7.
Motores más eficientes
Junto a los cambios estéticos, la firma de Ingolstadt también presenta una gama de motores -dos de gasolina y cuatro diésel- más refinada. De todos ellos sobresale especialmente, la versión denominada Clean Diésel, ya que presenta un consumo de sólo 8,9 litros cada 100 kilómetros.
Este Q7 más ecológico monta el propulsor 3.0 TDI con 240 caballos con un dispositivo de inyección por conducto común mejorado y un sistema de recirculación de gases de escape que proporciona una combustión más eficiente, un catalizar de DeNOx para captar los oxidos de nitrógeno así como una bomba que inyecta AdBlue, un componente derivado de la urea. Con todas estas soluciones el Audi Q7 Clean Diésel este todocamino cumple la normativa Euro 6 que entrará en vigor en 2014.
La segunda versión del 3.0 TDI, también con 240 caballos, ofrece un consumo ligeramente más alto con 9,1 litros cada 100 kilómetro. Los siguientes motores diésel son el 4.2 TDI que pasa de los 326 a los 340 caballos. El par en cambio se mantiene en los 760 Nm. El consumo se ha reducido también de los 11,1 a los 9,9 litros.
Como colofón a la gama diésel, el Q7 también está disponible con el motor de gasóleo de 12 cilindros en V, seis litros de cilindrada, rinde 500 caballos de potencia y logra un par máximo de 1.000 Nm. entre las 1.750 y las 3.250 revoluciones. Este Q7 V12 TDI acelera de 0 a 100 km/h en 5,5 segundos, su velocidad máxima limitada es de 250 km/h y el consumo medio es de 11,3 litros.
Respecto a las versiones de gasolina, este Audi Q7 mejorado estará disponible con el motor V6 3.6 FSI de 280 caballos, que genera 360 Nm. entre las 2.500 y las 5.000 revoluciones. Este motor presenta la misma potencia que en el actual Q7, aunque ha mejorado las cifras de consumo de 12,7 litros a 12,1 litros. El siguiente motor es un V8 de 4,2 litros FSI que entrega 350 caballos con un par de 440 Nm. a 3.500 revoluciones y un consumo de 12,7 litros, lo que supone un ahorro de casi un litro.
Todos estos motores presentan además un sistema que reduce aún más el consumo y que es muy similar al Kers utilizado en la Fórmula 1. Se trata de un distpositio que en transforma la inercia lograda en las fases de frenado y de marcha y la transforma en electricidad que se almacena en las baterías. Según Audi, este sistema es capaz de ahorrar hasta 5 gramos de CO2 por kilómetro recorrido.
