Si nos creemos lo que la cadena de radio SER contó ayer por la noche (que eso ya es hacer un buen acto de fe), el contrato de Fernando Alonso por la escudería Ferrari ya está depositado en la Junta de Reconocimiento de Contratos. Según se cuenta, el asturiano firmará por nada menos que seis temporadas (habrá que ver si las cumple), a razón de 25 millones de euros por año, lo cual hace un total de nada menos que 150 millones de euros.
Una de las condiciones que habría puesto Fernando para fichar por Ferrari es la de tener lejos a Michael Schumacher, para que no haga sombra a sus decisiones. Lo cierto es que firmar un contrato tan a largo plazo es extraño para una escudería acostumbrada a cosas de un par de temporadas con renovaciones, pero parece que este es el compromiso en firme más importante de Maranello desde la llegada de Michael Schumacher, y parece que con Alonso se quiere iniciar otra era triunfal como la del kaiser, donde Fernando decida por qué camino tirar el desarrollo del coche.
Según se dice, el anuncio será oficial el próximo jueves, cuando el tema de Raikkonen estará ya solucionado. Una vez anunciado esto, en Suzuka probablemente pasaremos a saber que Kubica va a Renault, Raikko a McLaren, Kovalainen a Williams, Nico a Brawn GP, y quién sabe cuántas cosas más.