Cuando el otro día se presentó el nuevo Audi A8, fueron numerosas las críticas que leímos sobre lo continuista y poco rompedor de su diseño. La casa de los cuatro aros no ha podido mantenerse más con la boca cerrada sobre este tema, y Johan de Nysschen, vicepresidente de la marca para Norteamérica, ha acabado por contarnos anticipadamente el resto de la historia.
Y es que si el A8 es tan «sosete», es porque los de Ingolstadt se han guardado toda la caballería de estética radical y avanzada para el ya por todos conocido y esperado A7, el cual, según de Nysschen, compartirá la práctica totalidad de la estructura del A8, e irá ofrecido al mismo cliente potencial del mismo segmento.
Vamos, que si te quieres comprar una súper berlina de gran tamaño y el A8 no te convence, tal vez debas esperar a ver que cara nos trae el A7, que debería aparecer a mediados de 2010. Por cierto, también se confirmó que se está trabajando en un S8, lo que nos permite soñar a su vez en un S7.
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