El nuevo director deportivo y director general de la escudería Campos Meta (que pronto dejará de llamarse así), Colin Kolles, ha hablado largo y tendido sobre la situación en la que se ha encontrado al equipo español tras la compra de este por parte de José Ramón Carabante.
El ex jefe de Midland, Spyker y Force India nos ha desvelado que el proyecto estaba más en pañales de lo que Adrián Campos nos hacía creer ya que prácticamente lo único que había construido era el monoplaza, que aún por encima no han fabricado ellos sino Dallara.
Una vez que Campos y su director gerente, Daniele Audetto, ya estaban fuera del equipo, Kolles se ha pasado las últimas semanas de un lado para otro, tratando de poner en marcha una escudería de Fórmula 1 que prácticamente no existia: «Durante dos semanas me he ido a dormir dos horas por noche. Es el momento más increíble. Empujo más y más, y no voy a renunciar a nada hasta que esté allí. Quiero tener éxito en llevar al equipo a la parrilla, en sobrevivir todo el año, en estabilizarlo y luego en construirlo.»
No había nada: «¡Mi papel es el de limpiar el caos! No tenían prácticamente nada, sólo caos. El único departamento que prácticamente existe es un departamento de software, con ocho chicos que nunca han visto un coche de F1 en sus vidas, y que están haciendo programas de simulación por software. Y luego hay dos o tres ingenieros con experiencia en la F1, y eso es todo. La verdadera historia es una historia loca, ¿entiendes?»
El objetivo es presentarse en el primer Gran Premio del año: «Vamos a tener dos coches en Bahréin. No sé cómo los vamos a tener, y no me importa, pero vamos a tener dos coches en la parrilla. Si alcanzamos eso, creo que será una de las cosas más sorprendentes, te lo digo. No tenían nada. Tenían un taller vacío sin nada dentro…»
De momento, el equipo funcionará desde la fábrica de Dallara, a donde ya se han mandado los motores Cosworth y las cajas de cambio Xtrac para su montaje: «La sede estará en España, pero por ahora vamos a trabajar en Dallara, para la primera carrera, y veremos. A medio plazo estaremos definitivamente en España. El equipo tendrá su sede en Murcia. Tenemos que construir la fábrica de diseño, el túnel de viento y todo.»
Las opciones de hacer un ‘shakedown’ del monoplaza antes de viajar a Bahréin son escasas, pero Kolles sigue trabajando en construir un equipo de carreras casi desde cero: «Hay cosas que serán las últimas, irán a última hora, porque hacer un equipo en dos semanas no es fácil. Sólo es posible porque tengo la infraestructura. Tengo gente trabajando para mí como Mike Krack, que era ingeniero jefe de BMW, por ejemplo. Geoff Willis es una especie de consultor en este momento, y vamos a ver cómo vamos a proceder con él.»
«Tengo una gran cadena de cosas por hacer, pero este es el menor problema, los mecánicos e ingenieros, y así sucesivamente. Esto está casi resuelto ya. Hay otras cuestiones. Sobre todo tienes que llegar a acuerdos con Cosworth, Dallara, Xtrac, todos los otros proveedores, las negociaciones con los pilotos, con Bernie… Tienes que eliminar a los ‘impedimentos para la carrera’, ese es el punto.»
El comunicado de prensa oficial emitido esta tarde decía que la alineación de pilotos será anunciada pronto y no nombraba por ningún lado a Bruno Senna, pero Kolles ha dejado caer que eso no significa que no vaya a correr con ellos en 2010: «Está muy claro que necesitamos presupuesto para rescatar al equipo… y eso lo es todo. En Jordan [en 2005] también tuve que empezar con pilotos de pago. Después de cuatro años ya tienes pilotos profesionales. Cuando el equipo está funcionando y es eficiente, es decir, en una segunda página.»
Ahora que Adrián Campos ya no forma parte del equipo, no tendría sentido mantener el mismo nombre. Colin asegura que será cambiado, pero todavía podría tardar algún tiempo, ya que hay que recibir la aprobación de la FOTA, de la FOM y de la FIA para ello: «Será uno diferente… vamos a esperar.»
Ante la pregunta ‘¿seguirá teniendo un sabor español?’, Kolles responde con cierta picaresca que: «Yo no lo creo. Tal vez un sabor americano. ¡Tal vez un sabor americano-español!»
