La automoción ha comenzado el ejercicio de 2010 como el sector que más contribuye a la recuperación de la economía, tanto por su aportación al consumo como por su contribución a la actividad de la industria, según se desprende de los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En concreto, la facturación por venta de automóviles y motocicletas ha registrado en enero un repunte del 9,4 por ciento en comparación con el mismo mes del ejercicio precedente. De esta forma, el sector del automóvil se ha convertido en el único que ha registrado un crecimiento interanual, en contraste con el descenso del 4,1 por ciento experimentado por la facturación del sector servicios en su conjunto.
De hecho, las ventas de automóviles han ascendido a 161.411 unidades durante los dos primeros meses del año, cifra superior en un 32,9 por ciento a la contabilizada en el mismo período del ejercicio precedente, cuando se registraron 121.492 matriculaciones, si bien los volúmenes contabilizados en 2009 fueron muy bajos. Por otra parte, los datos del INE revelan que la facturación de la industria de fabricación de vehículos a motor ha experimentado un fuerte crecimiento del 41,9 por ciento en enero, respecto al mismo mes de 2009.
Este notable incremento ha conducido a que la cifra de negocio del sector de bienes de equipo aumentara un 8,5 por ciento enero, lo que su vez llevó a la industria española a elevar un 1,1 por ciento su facturación, lo que supuso el primer dato positivo desde julio de 2008.
La producción de vehículos en las fábricas instaladas en España se ha elevado a 200.983 unidades durante el pasado mes de enero, lo que supone un fuerte aumento del 63 por ciento respecto al mismo mes de 2009, según cifras de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac).
Pese al positivo arranque del año de la automoción tanto en el plano industrial como en el comercial, fuentes del sector estiman que la situación cambiará en el segundo semestre, toda vez que el mercado se verá afectado por el fin de los incentivos del Plan 2000E y por la subida del IVA del 16 por ciento al 18 por ciento, prevista para el próximo mes de julio.