El grupo parlamentario de CiU llevará al Pleno del Congreso del próximo martes una iniciativa con la que pretende instar al Gobierno a «prorrogar con carácter urgente» las ayudas a la compra directa contenidas en el Plan 2000E para lo que queda de 2010, así como a buscar una solución al pago de la deuda de las Administraciones Públicas con los concesionarios por adelantos no reconocidos de las ayudas, que el sector cifra en 13,9 millones de euros.
La iniciativa es consecuencia de la interpelación que el pasado miércoles dirigió la diputada de CiU Inma Riera al ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, quien ha descartado la ampliación de estas ayudas porque podrían contribuir a «agravar el déficit» y ha señalado que tampoco ha sido solicitada por ninguna de las comunidades autónomas que participan en el Plan 2000E.
Ante esto, el e portavoz de Industria de CiU, Josep Sánchez Llibre, sostiene que con el mantenimiento de esas ayudas a la compra de vehículos se conseguiría una venta adicional de 150.000 unidades de vehículos, que permitirían «notables ingresos para el Estado a través del IVA y los Impuestos especiales» que sobrepasarían el coste de las mismas.
CiU reclamará también que el nuevo Plan de Competividad del Sector de la Automoción, que el Gobierno aprobará para 2011 en el marco del Plan Integral de Política Industrial 2020, incorpore tanto a las empresas fabricantes como a los proveedores de componentes de la industria de automoción, operadores logísticos y gestores de infraestructuras, así como de la industria de ruedas.
Asimismo, pide que el Ejecutivo impulse «con urgencia», en colaboración con el sector, una solución para satisfacer todas aquellas operaciones vinculadas con el Plan 2000E que «por problemas en el funcionamiento de su acreditación» no han recibido ayudas, aunque han sido adelantadas por los concesionarios, que ahora reclaman a las Administraciones Públicas la devolución de 13,9 millones de euros.