Ford se está tomando muy en serio el desarrollo de su plataforma de comunicaciones y entretenimiento SYNC; eso, ya lo sabíamos. Lo que no esperábamos es que además de sugerir direcciones o leer mensajes SMS, también fuera a cuidar de nosotros como si fuera una auténtica enfermera. Si el otro día el óvalo azul nos hablaba de sistemas de control de glucosa para diabéticos y avisos de niveles de polen pensados para advertir a los alérgicos de que no han de bajar las ventanillas, ahora la compañía ha anunciado el desarrollo de un asiento para automóviles capaz de vigilar el ritmo cardíaco, con el objetivo de prevenir ataques de corazón al volante.
Igual que los fabricantes japoneses no dejan de pensar en su población mayor con vehículos adaptados a sus necesidades, Ford, partiendo de la premisa de que para el año 2025 el 23% de la población europea superará los 65 años, ha creado un asiento con seis sensores en el respaldo pensados para seguir la actividad cardíaca del conductor a través de la ropa, monitorizando cualquier variación sospechosa. De registrarse una irregularidad como las que preceden a un ataque, el sistema avisaría al conductor para que detuviera el vehículo lo antes posible, y si fuera necesario, SYNC mandaría una señal de aviso a los servicios de emergencia con las coordenadas GPS.
Según Ford, «el asiento ha registrado lecturas precisas durante el 98% del tiempo de conducción al 95% de conductores», pero todavía queda trabajo por hacer. Además de aumentar su fiabilidad, Ford quiere desarrollar sensores que funcionen de forma adecuada con todo tipo de tejidos (la lana parece ser especialmente problemática por su baja conductividad), de forma que todavía no quiere hablar de fechas ni nada que se le parezca.
Gallery: Asiento ECG Ford
Nota de prensa:
Investigadores de Ford desarrollan un asiento de conductor que monitoriza la actividad cardíaca
* Los ingenieros de Ford pretenden reducir el número de accidentes causados por ataques cardíacos al volante mediante un innovador proyecto de investigación que incorpora un sistema de monitorización cardíaco en sus vehículos
* El asiento con monitorización cardíaca podría vincularse a otros sistemas de seguridad de Ford para reducir riesgos para conductores con afecciones cardíacas y beneficiar a otros conductores al evitar posibles accidentes
* Incluso en sus primeras fases de desarrollo, esta monitorización cardíaca sin electrodos, que usa sensores especiales, facilita lecturas precisas durante el 98% del tiempo de conducción al 95% de conductores
AACHEN, Alemania, 24 de Mayo, 2011 – El departamento de ingeniería avanzada de Ford ha desarrollado un prototipo de asiento que permite monitorizar la actividad cardíaca del conductor y haría posible reducir el número de accidentes y víctimas derivados de los ataques al corazón al volante.
Los ingenieros del Centro de Investigación Europeo de Ford en Aachen, Alemania, en estrecha colaboración con la Universidad Técnica de Renania-Westfalia en Aachen, se embarcaron en este proyecto que pretende dar solución a un problema que a menudo se pasa por alto, los accidentes causados por conductores que sufren problemas cardíacos.
El prototipo de asiento que desarrolla Ford utiliza tecnología ECG (electrocardiográfica) que monitoriza los impulsos eléctricos generados por el corazón, convirtiéndolos en señales que pueden ser analizadas por expertos o software médico, y detecta signos de irregularidad que pueden avisar de manera preventiva que el conductor debería buscar atención sanitaria, porque podría padecer un ataque cardíaco u otras dolencias cardiovasculares. Allí donde una máquina electrocardiográfica normal en la consulta de un medico requiere que se apliquen electrodos metálicos en la piel en diversas partes del cuerpo del paciente, el asiento ECG de Ford tiene seis sensores que detectan la actividad cardíaca a través de la ropa del conductor.
«Este sistema será capaz de detectar si alguien sufre algún problema cardiovascular, por ejemplo un ataque al corazón, y también se podría usar para detectar los síntomas de otras dolencias como alta presión sanguínea o desequilibrios en los electrolitos», cuenta el doctor Achim Linder, oficial médico del Centro de Investigación de Ford. «Esto no sólo beneficia al conductor, sino que podría hacer que las carreteras sean más seguras para todos los usuarios».
En sus primeras pruebas, el asiento ha registrado lecturas precisas durante el 98% del tiempo de conducción al 95% de conductores. Los ingenieros de Ford siguen estudiando cómo se pueden fabricar sensores que capten señales a través de un mayor número de materiales, incluyendo aquellos que interrumpen las lecturas con su propia actividad eléctrica, como la lana o determinados tejidos sintéticos.
Las investigaciones del programa IMMORTAL de la Unión Europea, que se desarrolló durante tres años, concluyeron que los conductores enfermos de enfermedades cardiovasculares tienen, un 23% más de posibilidades de media de verse implicados en un accidente de carretera. Para los conductores que sufren de angina de pecho, la cifra sube hasta un 52%.
Teniendo en cuenta que el 23% de la población europea tendrá 65 años o más en 2025, y que esta cifra llegará al 30% en 2050, es evidente que el número de conductores con riesgo de sufrir ataques cardíacos aumentará en las próximas décadas.
Rápida respuesta a través de la interacción entre tecnología
Ford también está haciendo pruebas con el prototipo de asiento para entender cómo podría combinarse con otros sistemas avanzados de vehículos Ford para avisar al conductor que se detenga y busque atención médica, o incluso enviar una alerta a servicios médicos si fuese necesario
Lindner dice que el teléfono móvil podría jugar un papel clave como interfaz para cualquier futura aplicación tecnológica. Conectado a un sistema como Ford SYNC con MyFord Touch, que llegará a Europa en 2012, el asiento con monitorización cardíaca tiene el potencial de utilizar el teléfono móvil del conductor para enviar un mensaje a centros médicos, alertando al personal sanitario de actividad cardíaca irregular. El asiento también se podría vincular a la function de Emergency Asssitance del SYNC para informar a los equipos de urgencias del estado cardiovascular del conductor antes, durante y después de un accidente.
Ford está explorando las posibilidades de avanzar en tecnologías de seguridad como el Aviso de cambio de carril con la Ayuda de mantenimiento de carril, el sistema de velocidad a bajas velocidades en ciudad y el limitador de velocidad, que podrían combinarse con el asiento monitor para proteger a los conductores en caso de dificultades cardíacas.
Los ingenieros de Ford están estudiando cómo el asiento puede ser utilizado para mantener en observación a pacientes con afecciones cardíacas y permitir a sus médicos mantener un seguimiento de su actividad cardíaca que puede transmitirse a profesionales de la medicina y reducir la necesidad de visitas al hospital.
«Aunque se trata de un proyecto de investigación, esta tecnología podría ser un avance importante», dice Lindner. «Como pasa siempre en el campo de la medicina, cuanto antes se detecte una dolencia, más fácil será tratarla, y esta tecnología tiene el potencial de ser fundamental en el diagnóstico temprano de afecciones cardíacas».