El 1 de noviembre entra en vigor la nueva etiqueta europea de neumáticos, una pegatina en la que se cataloga cada cubierta por su resistencia a la rodadura, adherencia sobre mojado y rumorosidad.
El mes de noviembre comienza con cambios de legislación: entra en vigor la nueva etiqueta europea de neumáticos, un sencillo mecanismo con el que la Unión Europea (UE) pretende bajar las emisiones contaminantes derivadas del tráfico rodado, reducir la siniestralidad y, de paso, ayudar a los usuarios a elegir la cubierta que mejor se adapte a sus necesidades.
Desde el 1 de noviembre y por imperativo europeo, todos los neumáticos que se pongan a la venta llevarán una pegatina que identifique sus características. Con la entrada en vigor de la nueva etiqueta europea de neumáticos, no se busca aumentar las ventas (los fabricantes tampoco lo esperan), pero sí mejorar el proceso de compra.
Elegir bien los neumáticos y mantenerlos en buen estado te puede evitar más de un susto y, de paso, te ayudará a ahorrar algo de dinerito. Ten en cuenta que…
-El riesgo de sufrir un accidente mortal por llevar los neumáticos pasados es el doble que el que se deriva de cualquier otro defecto del vehículo.
-El consumo de carburante de tu coche depende en un 20% de la resistencia a la rodadura de los neumáticos.
-Circular con menos presión de la debida aumenta hasta en un 5% el consumo de carburante y disminuye la vida útil del neumático hasta en un 25%.
La nueva etiqueta europea de neumáticos (también conocido como etiqueta ecológica o eficiente) ofrece información acerca de tres parámetros: eficiencia energética, seguridad y ruido ambiental. Con esto, puedes saber qué neumático consume menos carburante, frena mejor sobre mojado y es más silencioso.
La mala noticia es que, en el mercado de las ‘gomas’, como en casi todos, las mejores son las más caras. No se trata de gastar un dineral, pero normalmente es recomendable pagar un poco más, pues, a la larga, gastarás menos.
Durabilidad neumático
Claves para una buena compra
El club Racc y el fabricante Michelin han unido sus fuerzas para analizar los pros y los contras del nuevo sistema de etiquetado europeo de neumáticos, primero, y formular varios consejos de compra, después (puedes contrastar todas las opciones en nuestro configurador web de neumáticos, Rezulteo). Ambas entidades apoyan el etiquetado, pero echan en falta información sobre la vida útil de las gomas (algo que, a su juicio, debe ser fundamental a la hora de elegir un neumático).
Las claves para una buena compra son:
-Pregunta por la vida útil del neumático, su adherencia en curvas y su eficacia en suelo seco. Esto no viene en la etiqueta.
-No te conformes con un neumático barato. El ahorro inicial desaparece si el neumático muere antes de lo esperado, consume mucho combustible o necesita múltiples reparaciones.
-Escoge una cubierta con calificaciones equilibradas en consumo y seguridad. Un neumático B-F, por ejemplo, te permitirá ahorrar en combustible, pero a costa de disminuir la seguridad.
-Busca el equilibrio, pero que sea en la parte alta de la tabla. Imagina que eliges un neumático con calificación E-F. Evidentemente, los criterios de la etiqueta están compensados, pero muestran carencias tanto en eficiencia como en seguridad. Si puedes, opta por lo más cercano a la clasificación B-B.
Lo que dice la etiqueta…
Al entrar en vigor la nueva etiqueta europea de neumáticos, se aporta información sobre tres parámetros. Su objetivo es que, de un solo vistazo y con una escala de letras, el usuario sepa cómo de eficiente y seguro es cada uno.
Consumo de carburante
En función del nivel de resistencia a la rodadura, se clasifican de la A a la G (A es máxima eficiencia energética). Entre la primera y la última hay una diferencia de hasta 0,5 l/100 km, es decir, un turismo que consume 7 l/100 km ahorra un 7,5% de carburante.
Eficiencia y Adherencia de los neumáticos
Adherencia
Esta prueba se usa para medir la seguridad del neumático. Los clasifica también de la A a la G. En España, no se admiten los valores D y G (este último por no ser suficientemente seguro) y, en 2014, se eliminarán las cubiertas con nota F. Un G necesita hasta 18 metros más para detenerse que un A.
Rumorosidad
En esta parte del etiquetado se cataloga el ruido exterior que desprende un neumático al circular. Se mide en decibelios y se refleja en la etiqueta a través de una, dos o tres ondas.
