Para los que disfrutamos con la práctica de los vehículos a motor, conducir una motocicleta, en la presente primavera y en los meses próximos, es un verdadero placer.
A mis 83 años el placer me queda un poco limitado y he tenido que renunciar a más caballos y peso por razones obvias.
A pesar de todo y con las precauciones necesarias, llevo en mi autocaravana este precioso juguete Honda MSX de 125 cc, con el que me hago la ilusión de estar disputando un gran premio a 80 o 90 kilómetros por hora.
Se mata gente en la moto. Es cierto. Pero estoy seguro de que los que sufren esta desgracia van siempre rebasando los límites de la cordura.
Tambien es cierto que, las defensas de nuestras carreteras dejan mucho que desear y que los conductores de vehículos de cuatro ruedas, o no nos ven o no nos respetan.
Pero si mantenemos nuestra atención y la prudencia necesaria, la moto es toda una gozada que sólo entendemos los que la conducimos.
Disfruta de tu moto en el tiempo que viene. Yo seguiré haciéndolo mientras me queden las fuerzas necesarias.
¡Feliz verano en moto!
Paco Costas